Para que tu ropa quede más blanca, prueba a remojarla en una mezcla de agua y percarbonato antes de lavarla. Este tratamiento ayuda a eliminar las manchas difíciles y hace que tu ropa quede más brillante.
2. Peróxido de hidrógeno: una alternativa suave a la lejía
El peróxido de hidrógeno es una excelente alternativa natural a la lejía. Hace que la ropa quede más blanca sin dañar el medio ambiente como la lejía común. A continuación, se explica cómo utilizarlo:
Coloque 1 cucharada de peróxido de hidrógeno en la ranura de detergente de su lavadora.
Tenga cuidado de no usarlo demasiado, ya que puede ser peligroso.
3. Jugo de limón: fresco y sabroso
El jugo de limón es un ingrediente común en la cocina y también se puede utilizar como un excelente blanqueador natural para la ropa. Para blanquear la ropa con jugo de limón:
Coloque una cucharada de jugo de limón en la ranura del detergente.