Ayuda en la eliminación de toxinas.
Reduce el riesgo de cálculos biliares.
Estimula la regeneración celular.
Mejora el metabolismo.
Favorece la salud cardiovascular.
Reduce la acumulación de grasa en el hígado.
Ayuda a combatir infecciones bacterianas.
Favorece un mejor sueño.
Mejora la absorción de nutrientes.
Alivia los síntomas de acidez estomacal.
Reduce el estrés.
Combate la retención de líquidos.
Promueve un mejor apetito.
Fortalece el sistema linfático.
Previene el envejecimiento celular.
Texto intermedio: ¿Te interesa esta receta? Sigue leyendo para descubrir más formas de aprovechar las propiedades del Helichrysum arenarium.
2. Aceite de Helichrysum para la piel
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